La invisible realidad de las regiones en la pandemia: el caso de la región de La Araucanía

por Camila Carrasco y Cristian Quiroz, publicada en El Mostrador, 01 de abril de 2021

La pandemia provocada por el Covid-19 está generando efectos cotidianos que se expresan en los espacios locales. Según datos del Ministerio de Salud, La Araucanía presenta el número más alto de personas hospitalizadas por contagios y más de 300 están en recintos asistenciales, donde se suman y suman casos, en un contexto en el que prácticamente no existen camas críticas disponibles, el personal de la salud está sobrepasado y la economía de los hogares, como también, la salud mental de las personas está gravemente afectada.

Como Centro de Políticas Públicas de la UC Temuco quisimos hacer una contribución para presentarles a quienes están diseñando planes de gestión de riesgos, los resultados de un estudio sobre la percepción de quienes viven en comunas de La Araucanía, respecto de la gestión y medidas implementadas por diversas instituciones en el contexto de la emergencia sanitaria.

Estamos en la denominada segunda ola de contagios, por ello la importancia de conocer la percepción ciudadana de las medidas implementadas, el grado de adhesión y valoración, con objeto de considerar esta información.

Entre los resultados que más se destacan está el pesimismo respecto al avance de la pandemia en la región, a pesar de la valoración de las acciones tomadas para enfrentar el Covid-19 de, particularmente, autoridades locales, como también, el respaldo a que las decisiones se tomen de manera intergubernamental, es decir, que las personas consideran indispensables un trabajo coordinado entre las instituciones locales, regionales y nacionales a la hora de enfrentar la pandemia, como también considerar expertos en la materia.

De acuerdo con las medidas implementadas en la región existe una crítica ante beneficios que entregó el gobierno, pues solo el 27,1% de los participantes refiere haber recibido algún bono de emergencia por parte del gobierno central.

Otro hallazgo importante es que la comunicación y acceso a la información también es una preocupación ciudadana. En muchos casos, los medios de comunicación centralizan la realidad en la Región Metropolitana y unas pocas ciudades, pero no prioriza de manera sistemática cómo las regiones no cuentan necesariamente con condiciones para poder auto cuidarse, por ejemplo, si comparamos la encuesta Casen 2015 indica que el 13,9% de las personas de la región carece de servicios como agua potable y alcantarillado, lo cual es sumamente preocupante cuando el promedio en Chile es un 3,6%.

Esta realidad se agrava, porque la misma encuesta dos años después, presenta que la región empeoró en un 18,1% el año 2017. Sumamos a esto que La Araucanía registra un 28,5% en el indicador de pobreza multidimensional, el más bajo a nivel nacional.

Otro desafío importante es el repensar el funcionamiento de las instituciones. En nuestros resultados observamos que existe una mala evaluación a las autoridades e instituciones como las Fuerzas Armadas, carabineros y PDI. Lo anterior es opuesto a instituciones de salud.

La ciudadanía valora los servicios de atención primaria, secundaria y terciaria. De acuerdo con otras iniciativas, se destaca positivamente la postergación de créditos y el retiro del 10% de AFP. La pandemia volvió a observarnos como sociedad y replantearnos quién gestionará los riesgos más allá de la entrega de bonos o implementación de programas que permita un acceso equitativo a la red de salud y a un sistema de protección, como también, un resguardo de la calidad de la educación con un enfoque territorial.

En este sentido existe un desafío inmediato donde las medidas sean respuestas coherentes con la realidad país, como también, también, profundizar el debate en torno a la tarea de pensar en nuevas instituciones, incorporar una perspectiva territorial y considerar medidas que provengan desde las propias regiones, comunas y territorios.